lunes, 12 de marzo de 2007

La seducción de lo que estorba

Por qué será que cada vez que procuro almacenar algo que no utilizo me agarran una ganas de hacer uso precisamente de eso?

Hablo por ejemplo de archivar en CD's cosas que tenía en la máquina, como archivos de música que no oía mucho...y entonces ese deseo de oírlos me seduce y comprendo que terminaré dejándolos eternamente a mi dudosa disposición.

Cuando era niño, era una cosa grave con lo de los juguetes, y lo digo porque en general me gusta que las cosas guarden un relativo orden pero inevitablemente cuando quería evitar que ese Jep de juguete que tenía, ocupara sitio innecesariamente terminaba sacando mis soldaditos (sí, esos que tenían una base entre las piernas, eternizados en un furioso gesto de combate) y armando la guerra más emocionante del mundo (por lo menos para mí).

Creo que eso ha ayudado a mi manía de dejar todo tal cual estaba en su sitio. Adoro saber que cuando busque tal libro, siempre va estar allí, al lado de tal otro, o que si busco un polo en especial esta en tal cajón entre uno de tal color y otro así o asá. Es una seguridad que me complace.

No hay comentarios: